Se conoce como embarazo ectópico a aquel que se produce fuera del útero, es decir, el óvulo se instaura en otro sitio, en el 98% de los casos en las trompas de Falopio.
Por lo general estos embarazos no son viables y se interrumpen en el primer trimestre del embarazo porque pueden llegar a ocasionar daños graves en la madre, por lo contrario también ha habido casos de niños que nacen sanos en este tipo de casos aunque forman parte de una minoría.
En España no es demasiado normal que pase, las probabilidades estiman que un 2% de las mujeres pueden acabar teniendo un embarazo de estas características, le puede pasar a cualquiera pero hay unos factores que lo predisponen, como por ejemplo:
- Ser mayor de 35 años: aumenta la tasa de sufrir un embarazo ectópico entre los 35 y 44 años.
- Tener la trompas ligadas.
- Haber tenido una enfermedad pélvica inflamatoria: gonorrea o clamidia por ejemplo.
- Si se ha tenido un embarazo ectópico previo: aumenta entre un 10 y un 25 % que vuelva a ocurrir en embarazos porteriores.
- Mujeres portadoras de DIU.
- Tener defectos congénitos en las trompas de Falopio.
- Mujeres que sufren endometriosis.
- Tabaquismo: si la mujer fuma aumenta el riesgo el doble en padecer este tipo de enfermedad, la nicotina podría paralizar los cilios del revestimiento de la trompa de Falopio, vellosidades encargadas de llevar el huevo fecundado al útero.
En este tipo de embarazos a la hora de hacer la prueba daría positivo porque los niveles de la hormona gonadotropina coriónica se elevan pero sería un FALSO POSITIVO, ya que, el embarazo no sería viable. Si la hormona se encuentra a niveles mayores de 1500 mUI/mL entre la tercera y cuarta semana o 5000 mUI/mL entre la quinta y la sexta semana ni se visualiza al embrión dentro del útero se confirma el diagnóstico de embarazo ectópico.
A parte de esto, aparecen síntomas alarmantes como:
- Dolor muy fuerte en la parte baja del abdomen sobre todo en uno de los lados, se produce al realizar esfuerzos como toser, evacuar o incluso al orinar pudiendo llegar a producir la rotura de la trompa de Falopio, si esto llegara a suceder en dolor pasaría a ser muy agudo y constante durante un periodo de tiempo corto y se propagaría por toda la zona pélvica.
- Antes de los dolores suelen aparecer pérdidas vaginales, ya que en estos casos siempre hay sangrado y si la trompa de Falopio se llega a romper presentaría una hemorragia intensa.
- Náuseas y vómitos.
- Con la rotura de la trompa se produce un estado de debilidad llegando a provocar desvanecimiento, pulso rápido, débil y piel fría y húmeda.
- Lumbago y dolor en los hombros.
- Suelen presentar presión en el recto.
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