Problemas durante el embarazo: POCO LÍQUIDO AMNIÓTICO

El líquido amniótico cumple un papel fundamental durante el embarazo, por eso cuando el líquido es bajo comienzan los problemas. Algunos de los factores de los que se encargan el líquido amniótico son los siguientes:
 - Ofrece amortiguación y esto hace que se eviten los traumatismos en el feto.
 - Mantiene la temperatura constante en el útero.
 - Protege de las infecciones
 - El líquido le permite al bebé moverse y esto es beneficioso porque el bebé puede desarrollar mejor los músculos y huesos.

 ¿CUÁNTO LÍQUIDO AMNIÓTICO SE DEBERÍA TENER?
 Normalmente el líquido amniótico aumenta hasta el inicio del tercer trimestre del embarazo llegando a sus niveles más altos sobre la semana 35 alcanzando el volumen normal de 1 litro, a partir de ahí va disminuyendo hasta el momento del parto. En el caso de que haya menos líquido amniótico de lo normal se le llama OLIGOHIDRAMNIOS, por lo contrario si lo hay en exceso se le llama HIDRAMNIOS.

¿QUÉ PODRÍA CAUSAR ESTE PROBLEMA?
 Se sabe de este problema si se ha pasado de la fecha del parto, de todas formas cuanto más tarde aparezca esta complicación mejor va a ser para el bebé.Las causas más frecuentes de poco líquido amniótico son las siguientes:
 1. Rotura de membranas: Esto provoca que se pierda líquido amniótico, la mujer va a notar este signo porque es probable que se encuentre la ropa mojada, en caso de que esto pase se le deberá consultar al médico lo antes posible, suele producirse con el embarazo avanzado, casi cerca del parto.
2. Problemas de placenta: Si la placenta se desprende de la pared uterina quiere decir que no le va a poder pasar al bebé nutrientes y sangre, por lo tanto el feto no producirá orina y como consecuencia tampoco líquido amniótico.
3. Ciertas afecciones como HTA, diabetes gestacional o lupus que pueden bajar el volumen del líquido.
4. Embarazo de gemelos, trillizos o múltiples bebés: Se puede dar el caso de que un bebé tenga demasiado líquido amniótico y el otro por el contrario carezca de él.
5. Anomalías congénitas: En el caso de que el bebé tenga poco líquido amniótico desde el primer trimestre del embarazo quiere decir que tiene problemas congénitos, bien sea por vías urinarias bloqueadas o porque los riñones no están funcionando al 100%.

*Una vez que este problema aparezca se pasará a tener inmediatamente un embarazo de riesgo.